Salida en familia para comer afuera. Lo difícil es ponerse de acuerdo.
Abelarda: Este restaurante debe ser medio de cuarta, por los precios.
Jacinto: ¿Salchichas con puré?
Borja: ¿Melón con jabón?
Max: Uf, es un error de tipeo. Terrible. No venimos más.
Jacinto: Bien de cuarta, decías, pero ya vas por el tercer plato, Abelarda.
Abelarda: Para opinar tengo que probar antes.
Unos años después…
Eduardo tocando un concierto a dos dedos.
Sopresas te da la vida. Max no se lo esperaba. Hay que ser ciego para no darse cuenta.
Cumpleaños con una de sus mejores amigas del cole
Las cosas van mal en lo de Tatiana. Ahora tiene que trabajar en catering.
El cumpleaños fue un embole.
Mimi buscando al Jacinto para una “entrega” especial. Y el Jacinto la sigue como un perro faldero.
Abelarda: Al final es mejor, dos por uno. Es mejor tener mellizos que ir engordando y desinflándose cada tanto.
Borja: Te pido que no toques más el piano cuando intento dormir. Tocás para el culo.
Edu: Borja, te prefería como fantasma. Te has hecho humano de nuevo y no te aguanta nadie.
Borja: Yo también te prefería como fantasmas. Al menos no podías rascar las teclas.
Nuevo curso de cocina internacional: comida árabe.
Max, para poder trabajar tranquilo, se mudó al ático de vidrio. Como nadie quiere subir dos pisos y atravesar la terraza, por vagos, nadie lo molesta.
Jacinto ahorró muchos simeleones y hoy se la juega.
Mimi: ¿Es original?
Jacinto: Sí, sí. Me salió una fortuna.
Mimi: Parece de cotillón.
Abelarda en la habitación de los mellizos.
Bienvenidos Sandro y Tristán a la familia Agapito.
Edu: Somos parientes del crítico de arte culinario, Max Agapito. Si nos sirve gratis, saldrá un artículo positivo sobre este maravilloso restaurante.
Borja: ¿Aceptaron?
Edu: Obvio.
Borja: ¿Cómo vamos a hacer para Max escriba algo positivo de este antro?
Edu: Vos sos el genio en informática y te jactás de hacker. Eso te lo dejo a vos.
Borja: ¿Tengo que hackearle?
Edu: Y te jactás de genio.
Papá chocho con sus dos varones. Abelarda se queja que es la única mujer en la casa rodeada de 7 varones.
Jacinto antes de salir a su “trabajo” de pastas.
Borja colaborando con la casa. Ahora que están los mellizos, no alcanzan los brazos.
Edu: Si lo sacudo, no llora, pero me duelen los brazos
Max: No doy más, pero eso sí, vamos a sacar músculos.
Edu: Por eso lo levanto.
Se nos casa el Jacinto.
Cara de nada de Sandro. No quería asistir a la boda y lo llevaron igual.
Edu insistió con tocar en la boda. Mimi se queja porque dice que desafina.
Mimi: ¡Cómo que te robaron los anillos!
Jacinto: No los tengo. Los tenía en el bolsillo.
Sin anillos, la boda no se detuvo, para alegría de Max que ya no soporta a Jacinto en la casa.
Brindis de Max. Ya Edu y Borja se pelean por la habitación libre que dejó la partida de Jacinto.
Copas de más, descanso en los baños.
Tristán y Sandro aburridos.
Viva el helado. Dieta de los Agapitto.
Max de visita en la casa de Toribio.